
Jara y Osmani, junto a sus premios. Foto: L Eduardo Domínguez/ Cubadebate
Cuando Jara y Osmany, dos jóvenes de las provincias orientales, irrumpieron en los escenarios habaneros, dieron mucho de qué hablar. La integralidad, la limpieza de sus ejecuciones, el cuidado en los detalles de la interpretación y una notable empatía, fueron los elementos que le atribuyeron el triunfo a la pareja. Para muchos, bastó con esa mirada cómplice. Otros estupefactos ante las “cargadas”, recordaban las acrobacia del Circo del Sol, una virtud que quizá le deban a la práctica de deportes años atrás.