![]() |
Por M. H. Lagarde
Desde hace varios días, la mafia anticubana de Miami (representada por Marco Rubio y Mario Díaz-Balart), la Embajada americana en La Habana, el Departamento de Estado de EE.UU y su secuaz de la OEA, Luis Almagro, han puesto en el foco de sus habituales difamaciones contra Cuba el arresto del «opositor», José Daniel Ferrer.
Aunque sus defensores tratan de presentar el hecho como otra «violación de los derechos humanos» por parte del «régimen», el autoproclamado líder de la organización contrarrevolucionaria Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), se encuentra en prisión desde el pasado 1ro de octubre no precisamente por causas políticas sino por su reincidente accionar como camorrista y pandillero. Lee el resto de esta entrada