La noticia de que los médicos cubanos que salvan vidas en Guatemala se irían del país causó más de revuelo a finales de agosto. Numerosas fueron las voces que salieron en defensa de ese personal sanitario, y hasta el propio gobierno, para nada sospechoso de comunista, la ponderó muy satisfactoriamente. Su ministerio de Salud declaró que “sería terrible para nosotros que la brigada cubana se fuera, mucho menos en este momento”, en plena pandemia de COVID-19, ya que su papel es “indiscutible e irremplazable”.

Las puertas de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) se abrieron este dos de septiembre para recibir a una matrícula de más de 1 200 estudiantes.
Con los medios preparados en cada escenario educativo, la literatura docente actualizada y un claustro, que se distingue por su estabilidad y constante superación, los educandos tendrán un curso de calidad superior.
Tamara Torres Fernández, vicerrectora del Área Académica señaló que los estudiantes de nuevo ingreso ascienden a 400 procedentes de 80 países. “Estos estudiantes comienzan con el plan de estudios E, este les permite una formación como médicos capaces de atender problemas de salud en cualquier parte del mundo”. Lee el resto de esta entrada